Si los clientes prefieren la marca Bormey es porque Bormey trabaja incansablemente por satisfacerlos.
Es porque La casa del maní, como Santa Clara conoce nuestro negocio, no vende solo productos sino auténticas experiencias de sabores 100% naturales y cubanos.
En Bormey, la tradición recorre un largo camino desde el surco hasta la mesa, donde tradición y renovación devienen la principal inspiración.
Comprometido con su comunidad y con los valores de una cultura autosustentable, este emprendimiento apuesta por el desarrollo local como máxima para el progreso de su ciudad.